Éste es un sub-blog de www.literaliamexico.blogspot.com. La promoción del autor, como escritor de cuento, novela, poesía y ensayo, es con el único fin de ofrecer al público lector una mirada retrospectiva de la obra de Arturo Juárez Muñoz, como pilar del proyecto de desarrollo y apoyo a jóvenes escritores.

sábado, 26 de marzo de 2011

BIOGRAFÍA

Nací un 27 de junio de 1953. Dijo mi madre que fue un día lluvioso, preámbulo de un verano que amenazaba ser el más intenso de los últimos años.
Siempre he creído que somos marcados por el tiempo que prevaleció el día de nuestro nacimiento, muy probablemente más que el influjo de los astros, signado en el horóscopo.
¿Cuándo miré por primera vez con conciencia un día soleado, una tarde crepuscular, una lluvia de estrellas? Me hubiese gustado saberlo para tener bien clara esa fecha como el nacimiento de mi capacidad sensitiva.
Mi niñez fue feliz, muy feliz. Muy a menudo me azora escuchar a personas expresarse que poco o casi nada recuerdan de sus primeros años. Me ilusiona imaginar que no necesitaba nada, me eran suficientes cualesquiera objetos en mis manos, para así dar rienda suelta a mi imaginación.
Un domingo como tantos pero también como ninguno, mi señor padre leía a sus amigos con voz llena de orgullo, un poema que yo le había escrito a un pajarillo que encontré moribundo tras caer éste de un árbol.
Lo llevé a casa y le prodigué mis mejores cuidados. Todo fue inútil para él pero marcó un destino para mi persona. ¡Había nacido un poeta dentro de mí!
En efecto, esa fue la oración que mi padre utilizara para referirse a mi faceta naciente e inexplorada: “Mi hijo va a ser poeta”
Cuántas veces la imagen recurrente de aquel día se ha repetido en mi cabeza. Su mirada brilló como nunca, y mi corazón, latía fuera de control.
Al morir mi padre pocos años después, tuve que construirme un santuario, una estratagema, una forma de vida oculta y aislada en un ostracismo aterrador, pues su recuerdo era más vivo que la realidad cotidiana. Yo hablaba con él, le contaba, le bisbisaba al hombre que caminaba a mis espaldas muy cerca, dándome palmadas de aliento para seguir adelante.
A partir de ese momento, una convicción se fortaleció en mi interior. ¡Amaba la literatura!
El tiempo pasó en mi juventud más rápido que una ráfaga de viento. Sin embargo, ello no obstó para que todo lo viese a través de tan maravilloso lente y lo plasmara en papel de muy diversas formas. Surgieron así los bocetos de novelas, de relatos cortos, de poesías que se sumaban en un carrusel interminable de pensamientos armónicos unos y desarticulados otros.
Me di entonces a la tarea de estudiar técnicas de versificación y corrección de estilo, dando por resultado una explosión de ideas, aunque no mucho avance en la calidad de mis composiciones.
Para ese entonces culminé mi carrera universitaria, Ingeniero Industrial y de Sistemas, la cual me proveyó de una disciplina y estructura mental que mucho me ha ayudado en el metódico y a su vez espontáneo quehacer poético.

Llegó la hora de unir mi vida a Patricia, mi esposa, intensificando mi pasión por la poesía y un irrestricto amor a la literatura universal. La llegada de mis dos maravillosos hijos, Arturo y Patricia del Rocío, quedaron plasmadas en un par de poemas que me han acompañado desde siempre. Así, mi vida caminaba en un destino de trabajo, de responsabilidades cumplidas y de apego a dos de mis grandes vocaciones: esposo y padre.

Tuvo que sobrevenir un evento dramático y conmovedor para arrancar de lleno y sin descanso lo que intento sea mi vida. La partida de mi señora madre me dejó demasiadas dudas existenciales, múltiples heridas y una sola tarea: la de construirme, por segunda ocasión, una razón que le diere sentido a mi vida personal, ya que las facetas de mi matrimonio y el impulso a la formación de mis hijos, estaban en plenitud.

Junio del año 2000, me desbordo sin control sobre el teclado de mi computadora, y escribo dos libros a la vez. A la par, un poemario a la muerte de mi madre complementa la cascada de explosión creativa, pues terminando los dos primeros libros, doy inicio al tercero y así sucesivamente. Era como prender un cigarrillo con la colilla del anterior. Así, llegué al número diecinueve.
Pasados los años, decidí crear mi propia editorial y publicar así mi primera novela, continuando posteriormente con relato corto. Los lotes de producción fueron suficientes para alentar mi proyecto, el cual prometía una proyección importante en diferentes ciudades de la República Mexicana.
Lamentablemente, al pretender ser publiado por editoriales de renombre, lo cual bien pudo haber sido un error, propició que las constantes negativas me orillaran a bajar mi ritmo de producción.
Para agosto del 2010, floreció la ilusión y convicción por retomar el proyecto que parecía adormilado. Decidí entonces incursionar en dos vertientes:
La primera, a través de un blog personal con el único objetivo de ofrecer a jóvenes escritores, las oportunidades que para mí fueron negadas. Es como surge Literalia México (www.literaliamexico.blogspot.com), cuyo crecimiento galopante rebasó todas mis expectativas, alcanzando en el primer semestre más de 14,000 accesos provenientes de una treintena de países alrededor del mundo.

En éste, el logro más hermoso que pude capitalizar ha sido la incontable cantidad de escritores y artistas diversos que he conocido. Omito enlistarlos para no cometer un acto de injusticia si no menciono a alguno de ellos.

La segunda, utilizar una plataforma de producción y venta a nivel internacional, con las opciones que el mundo moderno requieren: libro electrónico e impresiones físicas a domicilio (www.palibrio.com), siendo mi novela, 20 años después, la elegida. El próximo mes de julio será lanzada a la venta en 40 sitios de venta en la Internet. La siguiente producción en puerta, es: Antología Poética Literalia México y sus amigos, libro en el cual contemplo presentar parte de mi obra en éste género, así como la de grandes amigos escritores, noveles y consagrados, tanto del continente americano como de algunos países de Europa.

Para concluir esta biografía, el pasado 20 de junio del 2011 fui notificado por Certámenes Literarios Imprimátur III Edición, que fui ganador del Primer Lugar en la categoría de Poesía, y tercero en Relato Corto, lo cual me llena de una alegría inconmensurable y agradecimiento a Dios por el momento que estoy pasando.

Ésa es mi vida. Un caudal de ilusiones y de trabajo incesante que me ha brindado grandes satisfacciones, así como el fortalecimiento de una voluntad inquebrantable. Mi compromiso, sólo uno, que es participar en una visión de literatura comprometida con la Naturaleza, la Humanidad y un razón de entender mi vida terrenal.

Arturo Juárez Muñoz

2 comentarios:

  1. Querido Arturo:
    He llegado hasta aquí desde Literalia México.
    Todo el blog está lleno de buenas letras, buen gusto y elegancia.
    Hermosa biografía. Vocación de creación, vocación entusiasta hacia la literatura. Comparto esta vocación y lo celebro.

    Seguiré indagando en este hermoso blog, Arturo.

    Un abrazo fuerte desde España, país hermano y amigo.
    Ana

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  2. Mi muy querida y admirada Ana:
    Dirigirte un agrdecimiento se está convirtiendo en un ritual.
    Me resulta imposible desprenderme de esta gratitud que me llena de amor, alegría y admiración a tu persona.
    Aunque normalmente soy afectivo, nunca lo hago de tan ardorosa manera. Tú eres la gran excepción.
    Mil gracias por toda tu amistad, tu apoyo y tu carismática presencia en mi vida.
    Con afecto inconmensurable:
    Arturo

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